Gente que Vibra_

El lenguaje corporal de Sofía Valenzuela

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Lectura: 6 minutos

Fotografías por: Sofía Valenzuela @lasofi.va
Texto escrito por: Pablo Andulce @pabloandulce

El superpoder de Sofía Valenzuela es menos frecuente y más valioso de lo que ella misma cree. Me impresionaba cuando trabajamos a pocos puestos de distancia en la redacción de revistas de La Tercera, y todos sus fieles lectores continúan disfrutándolo –lo sepan o no- en la versión digital de la revista Paula. No importa la complejidad de los conceptos que contenga un artículo, Sofía SIEMPRE llegará a una síntesis visual comprensible y apropiada. Siempre.

¿A qué me refiero con ‘comprensible y apropiada’? Si el día a día de tu trabajo consistiera en dar respaldo visual a temas como las problemáticas del vientre de alquiler en Latinoamérica lo entenderías.

“Normalmente cuento con poco tiempo y una bajada de dos líneas. Empiezo a imaginarme conceptos relacionados a ese tema y los traduzco a imágenes. Mujeres, fecundación, transacciones, legislación. Desde ahí genero una composición”, dice Sofía. Para ella es simplemente parte de ser diseñadora, de comunicar visualmente.

Paula es un canal importante, de hecho el que deriva en más encargos freelance, pero las ganas de practicar y afinar esas capacidades comunicativas demandan otras instancias. Eso es @lasofi.va, la cuenta de Instagram donde Sofía vende sus prints y recientemente presentó un sistema tipográfico completo hecho en collage y con una serie acotada de elementos.

 

 

Paula es un canal importante, de hecho el que deriva en más encargos freelance, pero las ganas de practicar y afinar esas capacidades comunicativas demandan otras instancias. Eso es @lasofi.va, la cuenta de Instagram donde Sofía vende sus prints y recientemente presentó un sistema tipográfico completo hecho en collage y con una serie acotada de elementos.

“Quería seguir desarrollándome en el collage y necesitaba una excusa para hacer una serie. Seguía desde hace mucho tiempo esta cuenta de Instagram, @36daysoftype, que cada año lanza un challenge para que la gente haga sus tipografías ilustradas. Me ponía reglas, pero a la vez me daba libertad; ¡perfecto!”, recuerda Sofía. Recurrió entonces al inventario de sus imágenes, tonalidades y sensaciones favoritas: “me propuse trabajar con partes del cuerpo femenino y que se relacionaran de algún modo con lo natural; con agua, peces, plantas, hojas. Siempre me ha gustado usar ese tipo de imágenes. Me parecen muy atractivas estéticamente en sus formas, curvas, organicidad. Otra parte de mis reglas (autoimpuestas) fue la predominancia del blanco y negro; cuando entran colores, son tonos pasteles de verdes, azules, rosas y morados”.

Surge así este sistema tipográfico que, como tal, se articula a partir de recursos compartidos por varias letras, que integra el collage de una manera poética y refinada, sin dificultar lo fundamental: la lectura.

 

 

 

Surge así este sistema tipográfico que, como tal, se articula a partir de recursos compartidos por varias letras, que integra el collage de una manera poética y refinada, sin dificultar lo fundamental: la lectura.